Si su pareja nunca se ha involucrado en el manejo de sus finanzas compartidas, es posible que al principio necesite que lo apoye. Aquí hay algunas maneras de alentarlos a involucrarse más.
Comprender su punto de vista
Indice
Puede haber una serie de razones por las que su pareja puede ser renuente a desempeñar un papel en la gestión de sus finanzas. Si nunca antes han administrado su dinero solos, es posible que no piensen que es algo que puedan manejar. Un error de dinero en el pasado podría hacerles dudar de su capacidad para tomar buenas decisiones financieras.
En algunos casos, es posible que su pareja simplemente no tenga interés en administrar su dinero. Confían en ti y no sienten la necesidad de desempeñar un papel más activo. O puede asumir que no necesita su ayuda si nunca lo ha discutido.
Una buena manera de romper el hielo antes de lanzarse a una discusión en toda regla es preguntarles por qué no han estado más activos antes. Esta es una oportunidad para que compartan sus sentimientos y quizás abran la puerta a una discusión más profunda sobre finanzas.
Ten claro lo que necesitas
Si bien es útil comprender la perspectiva de su pareja, es igual de importante asegurarse de que comprenda lo que necesita, en términos de su apoyo y ayuda.
Si no está seguro de cómo es esa ayuda, pregúntese:
- ¿Con qué tareas presupuestarias o financieras me siento más cómodo?
- ¿Qué tareas me gustaría que mi pareja manejara?
- ¿Qué nivel de implicación necesito para que mi pareja sienta que estamos compartiendo la tarea de forma justa?
- ¿Qué beneficios emocionales ofrecería su ayuda? Por ejemplo, ¿te haría sentir menos frustrado o ansioso?
Hacer esas preguntas puede ayudarlo a comprender lo que quiere, así como a establecer expectativas claras sobre sus roles en lo que respecta a la administración del dinero. Las respuestas pueden ayudar a su socio a comprender mejor de dónde viene y cómo aliviar su carga presupuestaria.
Descubre qué motiva a tu pareja
Para algunas personas, hablar de sus finanzas es interesante. Para otros, puede ser aburrido o incluso frustrante: recopilar números y hojas de cálculo no es muy brillante. Si su pareja parece conformarse con usted cuando se trata de dinero, busque una manera de llamar su atención de manera positiva.
Por ejemplo, suponga que su socio tiene una ventaja competitiva. Podrías usar un desafío para involucrarte. Tal vez pueda encontrar una manera de ahorrar $ 100 adicionales al mes o pagar su deuda de $ 1,000 en las próximas ocho semanas.
No uses tácticas que puedan alejar a tu pareja, como el acoso, las quejas o la culpa. El objetivo es animarlos a hacer una asociación positiva con las finanzas, en lugar de una negativa.
Elige tus batallas
Hablar de dinero puede llevar fácilmente a peleas si usted y su pareja no están de acuerdo con cosas como los ahorros, el pago de deudas o los límites de gastos.
Pelear por dinero puede ejercer presión sobre su relación si los sentimientos de frustración o enojo siguen sin resolverse o si una pareja se siente ignorada o faltada al respeto.
Establecer expectativas y límites se vuelve vital. Puede eliminar la confusión o la información errónea trabajando juntos para crear reglas básicas para tomar decisiones sobre el dinero.
Por ejemplo, puede establecer un monto semanal para gastos personales, pero acepta discutir cualquier compra de más de $ 500 antes de comprar.
Si su pareja se desvía de la fórmula, resista la tentación de consentirlo. Todos cometemos errores. Ejercitar la paciencia puede evitar que las finanzas y el presupuesto se conviertan en una fuente de estrés en la relación.